Vertebrata lanosa (Polysiphonia lanosa) es un alga marina de la familia de las algas rojas cuyo sabor se parece al de las trufas. Emprendido por Islensk Hollusta, importante proveedor de productos alimenticios innovadores procedentes de recursos naturales islandeses, «SEAGEM tenía como objetivo llevar Vertebrata lanosa a las cocinas de todo el mundo», destaca el coordinador del proyecto Eyjólfur Friðgeirsson, biólogo islandés y director general de Islensk Hollusta. Friðgeirsson comenta: «Si Vertebrata lanosa se considerase de alguna manera como la análoga marina de la trufa terrestre, podría convertirse en un producto de gran valor económico». Varios chefs comentaron que su aroma se parecía al de la trufa, lo cual llevó a Friðgeirsson a contactar con el Instituto de Ciencia de la Universidad de Islandia para evaluar el perfil aromático de Vertebrata lanosa. Querer es poder Al presentar el proyecto, Friðgeirsson explica: «En 2015, empezamos a recolectar, procesar y vender Vertebrata lanosa, que hemos bautizado como trufas de mar, a restaurantes en Francia, Islandia y otros países escandinavos». Como mencionamos anteriormente, al igual que los beneficios de los frutos secos, las trufas presentan ciertas ventajas para la salud debido a que contienen compuestos fenólicos, saponinas, proteínas bioactivas, glicoalcaloides y los ácidos fíticos.

A pesar de su elevado coste económico, una de las grandes ventajas de las trufas es que su intenso aroma permite trabajar con este producto en cantidades pequeñas. La recolección de la trufa se denomina por los truferos “cazar trufas”, en su origen, especialmente en Francia en la zona del Perigord, la trufa se buscaba con cerdos, sin embargo este animal tiene grandes inconvenientes para ser utilizado al ser un animal lento, glotón y difícil de amaestrar, es por ello, que la búsqueda o caza de trufa con perro es la más habitual (puede ser de cualquier raza aunque es aconsejable que sea resistente al frio y aguante toda una jornada de trabajo). De dónde la ha obtenido el ser humano ha sido más bien una cuestión de practicidad: aprovechar lo que se tenía a mano. A partir de ahí, la fase 1 del proyecto SEAGEM consistió en un estudio de viabilidad que analizó las pruebas. Un proyecto financiado con fondos europeos muestra el camino a seguir. No quiso oír más Amado, y emprendió el camino.

Cuando las uses para aromatizar alimentos es conveniente que lo hagas al menos durante 24 horas, consulta nuestros post de Huevos trufados con trufas silvestres y tostadas con trufas y aceite. Puedes consultar más información en el post ¿Quién marca el precio de la trufa? Si quieres obtener más información, puedes consultar nuestro post así debes conservar la trufa negra de Teruel. Hay diferentes tipos de trufas, algunas de ellas sin ningún valor culinario, sin embargo, otras variedades como la trufa negra de Teruel tiene un mayor valor por su excelente calidad. El uno hacía observar que hacía siete años que había aumentado mucho su fortuna, que Bonfons daba por lo menos diez mil francos de renta, y se encontraba enclavado, como todos los bienes de los Cruchot, en los vastos dominios de la heredera. En España, en los últimos años y debido a la demanda cada vez mayor de este hongo, podemos encontrar trufa fresca en algunos de los puestos de los mercados más importantes y en páginas de venta online de trufa. Respecto a la trufa de verano o Fresco Tuber Borchii Aestivum aguanta hasta casi un mes en el frigorífico, una vez pasado este tiempo hay que guardarla en el congelador o ponerlas con un licor o en vino (el brandy por ejemplo hace que la trufa se conserve durante más tiempo para poder seguir usándola a lo largo de todo el año, si no se acabará estropeando).

Hoy en día, existen muchas recetas de platos caseros que incorporan trufas, por lo que no es necesario esperar hasta poder ir a un restaurante para darte el gusto. De lo contrario, lo que se considera como un condimento gourmet puede desperdiciarse si no sabemos utilizarlos de forma adecuada. Si no tienes varillas eléctricas, utiliza el brazo de tu batidora y tritura como si fuese un puré, también así quedará bien. Sazonad bien con pimienta y si hiciera falta sal, zumo de limón o cualquier especia que os guste. Hacéis bien. Eso prueba que tenéis buenas disposiciones para la vida oriental. Otro factor que influye en el precio es si la trufa es silvestre o de plantación, siendo siempre las silvestres las más apreciadas por su aroma, sabor y textura, y de un mayor precio que la cultivada. Este hongo de sabor intenso y fuerte perfume, exalta un plato consiguiendo sorprender a tus comensales. Antes de incorporar las trufas frescas en alguna de nuestras preparaciones, es importante conocer ciertas virtudes de este tipo de hongo.